Vea cómo limpiamos el agua que usted manda por los drenajes de su hogar con un recorrido en persona o sumergiéndose virtualmente.
Los baños, fregaderos, lavadora de platos, bañeras, y lavadoras de ropa — hay muchas maneras de usar el agua en el hogar todos los días. ¿Usted se pregunta qué sucede con esa agua después de tirarla por el drenaje? Eventualmente, el agua del Condado de Washington termina en el Río Tualatin, pero pasa por un gran proceso para llegar allí.
La agencia Clean Water Services (CWS, siglas en inglés) opera cuatro instalaciones de tratamiento ultramodernas que ofrecen servicios a nuestra región: Durham, Rock Creek, Hillsboro y Forest Grove. Limpiamos más de 65 millones de galones de aguas residuales todos los días con algunos de los estándares más altos en la nación. El agua resultante es de tan alta calidad que mejora la salud del río.

Vea el proceso de tratamiento en acción en nuestros próximos recorridos por las instalaciones durante la primavera y el verano. Los recorridos en Rock Creek contarán con recuperación de recursos y producción de energía. Los recorridos en Durham destacarán nuestro sistema de cogeneración que convierte las aguas residuales y la grasa de los alimentos en energía limpia y renovable. Ambos recorridos por las instalaciones proporcionarán una mirada detallada detrás de las bambalinas del proceso de tratamiento. Recorrido en Durham aquí, o a Recorrido en Rock Creek aquí.
El agua que limpiamos pasa por varias fases de tratamiento. Esto incluye eliminar todo, desde retazos de limpieza y otra basura hasta bacterias y patógenos que solo se pueden ver con un microscopio. En las instalaciones de Durham y Rock Creek, agregamos una pequeña cantidad de cloro para matar cualquier patógeno — lo que lo hace tan limpio como el agua potable. Luego, eliminamos el cloro para asegurarnos de que el agua sea segura para la vida silvestre antes de regresar al río. En las instalaciones de Forest Grove y Hillsboro, desinfectamos con luz ultravioleta (UV, siglas en inglés).
Los sólidos eliminados durante el proceso de limpieza se descompondrán en nuestros tanques de retención, o «digestores», donde podemos recuperar nutrientes esenciales para fertilizantes, que se pueden usar en granjas, industrias y jardines domésticos. Esto minimiza el desperdicio, maximiza los recursos, y ahorra dinero a los contribuyentes. Usted puede explorar nuestro proceso en profundidad virtualmente.

El dinero de los contribuyentes nos permite proteger la salud pública y el medio ambiente en una cuenca delicada y desafiante. Conozca aquí el proceso presupuestario por el que pasamos de enero a junio para garantizar que podamos cubrir los costos operativos, mantener la infraestructura vital, y prepararnos para las necesidades futuras.